jueves, 29 de enero de 2015

Birdman (o la inesperada virtud de la ignorancia) (González Iñárritu,2015)


Sinopsis- Alcanzó la fama con un papel de superhéroe, Birdman y, a su madurez, Riggan (Michael Keaton) busca un papel significativo en su carrera como actor, busca su lugar en el mundo dentro del panorama de la interpretación teatral en Broadway. 

La puesta en escena que acompaña al protagonista
En un espectacular ejercicio fílmico, la cámara hace filigranas en todo el film, acompañando al protagonista en su locura interior, y sumergiendo al espectador en el caótico mundo de Riggan:

  • Planos en constante movimiento y el juego con los ángulos de la cámara, acompañados por la música de fondo de una martilleante batería
  • Planos secuencia infinitos que nos llevan entre bambalinas de un teatro decadente de Broadway.
  • Nueva York desde las alturas, impresionante
  • El plano secuencia de persecución entre Riggan y Birdman, su conciencia
    • Los sutiles y perfectamente hilados encadenamientos
    • Sensación claustrofóbica y angustiosa de la cámara: la esquizofrenia de Riggan es la esquizonfrénica cámara
    Todo un extraordinario ejercicio fílmico que cuenta una historia de manera inequívoca: narra el caótico mundo de un actor en decadencia con bipolaridad y esquizofrenia. 

    Toque crítico: ironía, amargura y decadencia
    González Iñárritu hace una feroz crítica a la sociedad del espectáculo en un mundo cambiante y cruel, en el que al teatro clásico lo invaden las nuevas tecnologías, en el que una 'celebrity' y el morbo acaparan más al público que las propias dotes de actor.
    La locura es un elemento perenne en todos los personajes que participan del mundo de la actuación. El film se convierte así en un metatexto que habla sobre la postmodernidad misma.

    Una maravilla narrativa y visual de González Iñárritu y de interpretación (Michael Keaton). 



    lunes, 19 de enero de 2015

    29 Edición de los Premios Goya

    El cine español se volverá a vestir de gala el próximo domingo 8 de febrero para premiar a nuestras películas en un año que han brillado por su calidad y por su extraordinaria recepción en las salas de cine. Sin duda, esta edición de 2015 será prometedora, y esperemos que sirva para consolidar la tendencia de apreciación hacia nuestro cine.  

    Las principales candidaturas y apuestas fuertes para estos Goya 2015 son:

    • El Niño
    • La isla mínima
    • Relatos salvajes
    • Magical Girl
    • Loreak
    Todas y cada una de ellas muestran el enorme talento y la gran calidad de las producciones cinematográficas en nuestro país pese a que las circunstancias en los últimos años no han acompañado a las grandes posibilidades de nuestro cine
    Me gustaría recalcar que estas producciones, de enorme calidad y potencial, no son fruto de 
    la política agresiva contra una de las verdaderas industrias "pesadas" de nuestro país: la industria del cine. 
    Estas películas son la consecuencia de muchos esfuerzos, personales y colectivos, para llevar adelante sueños, para convertirlos en proyectos, para ponerse a rodar con dificultades económicas, sin financiación, con un gobierno que ha dado la espalda a una de las más fructíferas vías de promocionar a un país: su cultura, su intelecto y su cinematografía. 
    Y con todo esto, cada año los Goya se vuelven más especiales y nos hacen creer en el potencial de capital humano y cultural que tiene España, un potencial que apuesta por poner en mayúsculas al CINE ESPAÑOL

    martes, 13 de enero de 2015

    Magia a la luz de la luna (Woody Allen, 2014)

    Sinopsis- Stanley (Colin Firth) es un afamado mago a nivel mundial en los años 20. Un viejo amigo de la infancia le cuenta que, en su lugar de veraneo del sur de Francia, ha llegado una joven americana (Emma Stone) con dotes de vidente. Stanley se propone desenmascarar a la farsante en una aventura romántica que le llevará por la Costa Azul.

    Encantador escenario: la Costa Azul francesa, años 20

    El film, ubicado temporalmente en los años 20, muestra el deslumbrante esplendor de un verano en la burguesa Costa Azul en Francia en un recorrido por unos paisajes naturales deslumbrantes y soberbios con una luz natural minuciosamente medida.
    La época que narra también destaca por su estética, tanto por el vestuario como por la atmósfera que recrea: las clases altas y sus fiestas, su derroche, su gusto por los placeres y los lugares idílicos. Hay algo que recuerda innegablemente a Medianoche en París, pero también hay ecos del Gatsby de Fitzgerald, o de Daisy Miller de Henry James, que perfectamente podría ser Sophie, la vidente.

    Creencia, misticismo, magia y religión


    El relato detrás de la comedia de enredos que nos propone esta vez Woody Allen es mucho más profundo de lo que las apariencias proponen. El momento histórico con el que coincide trae consigo reflexiones sobre la existencia y el más allá, sobre la religión frente a la racionalidad, la lógica frente a la magia, los límites del conocimiento humano. 
    La magia (el truco) siempre está presente, el angaño, el artificio, la mentira. Pero no nos queda más remedio que vivir, con todo esto, para ser felices. 

    Un clásico de la comedia romántica: el triángulo amoroso

    Woody Allen flirtea con el clásico lío amoroso entre dos opuestos irreconciliables en un cuento en el que parodia al bardo trovador, enamorado burgués embelesado por la belleza de su amada, y cuestiona los valores ético-sociales en la figura de Sophie.
    De nuevo opone lo racional a lo pasional, jugando con el engaño y desenmascarar al desenmascarado desde el primer momento.

    Una de las obras menores de Woody Allen en los últimos tiempos, aunque con una estética y una localización dignas de una obra maestra. 

    jueves, 8 de enero de 2015

    ¿Va a cambiar Netflix la manera de consumir cine en España?

    "En España se ve más audiovisual que nunca"

    Hace un par de años, hablando con Benito Burgos, asistente de la Directora del ICAA, me dijo esta frase que no se me va a olvidar nunca. 
    Es cierto, somos grandes consumidores de productos audiovisuales en España (series, películas...), algunas descargadas de manera legal, otras de manera ilegal, algunas visualizadas online, pagando (o no) por el contenido. 

    El modelo de consumo de cine está cambiando

    Primero llegó la irrupción de cine a la televisión de pago (Canal+), a la que pronto se unió el Vídeo Bajo Demanda, el consumo-cuando-yo-quiero que posiciona al espectador como señor y rey de la gran pantalla de televisión. Luego llegó la oferta de televisiones por cable e internet (ONO, Imagenio, Orange TV...). 

    El visionado de cine ahora se entiende más como un hecho individual y en el entorno del consumo doméstico que como un hecho colectivo, la experiencia de asistir a una película. 
    Varios factores explican esto:
    • La proliferación de avances tecnológicos en el ámbito doméstico (TV de plasma de dimensiones inimaginables, Home Cinema, Altavoces que nada tienen que envidiar al cine...) que permiten disfrutar de la alta calidad tanto de imagen como de sonido.
    • El encarecido precio de las entradas de cine que, salvo en ofertas, oscila sobre los 9€. 
    • Cambio en la percepción del objeto de consumo. Ya no es el hecho de consumir "ir al cine", sino de consumir películas, series...El valor reside en los contenidos, y se pueden consumir de manera colectiva o individual indistintamente.

    Todo esto nos lleva a una nueva esfera, la del cine en internet pay-per-view, como en uno de esos nostágicos videoclubs, en la que existen varios actores que ofrecer el visionado/alquiler/disfrute de un contenido previo pago del mismo, a precios reducidos. Ejemplos de ello son Filmin, con un amplio catálogo de cine de ayer y de hoy, Nubeox (de Grupo Antena 3) o Yomvi (de Canal+), ITunes, FilmoTech... Y es en este grupo de actores en el que entra en juego Netflix. 

    Netflix pretende saltar al campo en Europa este 2015

    En España, llega tras la aprobación de la reforma de una ley a caballo entre la protección de la propiedad intelectual y una cruzada antipiratería, también conocida como el 'tasazo Google', por el cuál los agregadores de contenidos (tales como las webs que exhiben o enlazan cine) deberán pagar a los titulares de los derechos de autor por la exhibición de sus obras.

    Además, también llega tras el mejor año (en cifras) de la historia de consumo de cine en salas de cine en España, lo cuál revierte (aunque en pequeña medida) la tendencia de los hábitos de visionado.

    Quizás no sea el escenario ideal para un nuevo agente cinematográfico, pero la versatilidad que Netflix ha mostrado en su natal EEUU lo sitúa en el punto de mira este 2015.

    Seguiremos informando... 

    martes, 6 de enero de 2015

    La representación del sexo en el cine contemporáneo (2011-2014)

    La exploración del sexo en pantalla: ellas y ellos

    Coincidió con el día de Navidad de 2013 cuando un transgresor Lars von Trier llevó a la gran pantalla la rompedora primera parte de Nymphomaniac, una cinta que narra explícitamente la historia de Joe (interpretada por Charlotte Gainsborough), una joven que a una muy temprana edad descubre su adicción al sexo. 
    La segunda parte de Nymphomaniac es una inmersión en la crudeza biográfica de Joe. El sexo se muestra de manera directa en la pantalla. Explícito, sin esconder nada. A veces duro, situaciones escalofriantes, situaciones cómicas. Violencia y sexo. Por primera vez se trata el sexo en el cine desde el punto de vista de una mujer, una mujer adicta al sexo. 

    Porque al hombre adicto al sexo ya lo conocimos en Shame (McQueen, 2011), encarnado por Michael Fassbender. Un relato escalofriante que despoja al protagonista de sentimientos: un autómata del sexo, sin escrúpulos. Una vida vacía, días intensos de trabajo, noches de cacería. El reflejo de un sector de la sociedad de clase alta, sofisticado, pero que ya no se oculta, que ya no tiene vergüenza de ser quien es en la intimidad. 


    Descubriendo el sexo. Adolescentes.

    La exploración del descuidado sexo adolescente se muestra en Joven y bonita (Jeune et jolie, Ozon, 2013), en el que una chica en plena pubertad, proviniente de una familia burguesa y acomodada, decide convertirse en prostituta de lujo, una visión muy diferente de esa exploración del sexo por parte de Benjamin (Dustin Hoffmann) en el clásico El graduado (Webb, 1967), en la que, joven e inexperto, descubre el placer de la mano de su vecina Mrs Robinson, una mujer amiga de los padres y de la edad de los mismos.
    Un visión muy diferente del sexo, sin duda, que muestra la evolución y aceptación social de lo "políticamente correcto", y hasta qué punto el sexo pasa de tema tabú a tema acogido por el público

    El sexo homosexual, también en sus mejores cines

    La vida de Adèle (Kechiche, 2013), es uno de los principales exponentes del cine lésbico, en el que una adolescente busca su identidad sexual, huyendo de lo "estipulado" y lo "correcto", enamorándose de otra joven de extravagante pelo azul. Una cinta en la que la representación del sexo es de las más explícitas en su género y en la que Adèle tendrá que enfrentarse a muchos obstáculos y desgarrar falsas convicciones para encontrarse a sí misma.

    Weekend (Haigh, 2011) hace lo propio en el cine gay. Un relato que huye de la frivolidad de las relaciones de una noche para narrar una historia de mucho sexo y sentimientos verdaderos.






    Parece que la representación del sexo en el cine está cambiando. Está cambiando principalmente desde lo que concierne a la "esfera de lo público", es decir, qué podemos visionar en espacios públicos, que no quiere decir por ello que sea lo moralmente aceptado por la sociedad en su conjunto.
    Estas películas oscilan entre el erotismo y la pornografía, por su alto contenido erótico, construidas con una puesta en escena regida directamente por parámetros eróticos (curiosidad, morbo, deseo).  Los cuerpos humanos se exponen a los ojos de un voyeur, espectador curioso que siente atractivo. El sexo, como antes ocurrió con la violencia, se naturaliza al insertarse en una serie de films que lo convierten en objeto de la cotidianeidad fílmica. Muestra de ello es la llegada el próximo mes de febrero de la adaptación de la novela 50 sombras de Grey.